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Mujeres entre copas surge de mi afán de compartir las experiencias que vivo con mis más preciadas compañeras de vida: mis amigas.

Me las he arreglado para compartir mi vida con mujeres apasionadas, desafiantes y audaces, que buscan de la vida mucho más de lo que buscaban nuestras madres; y quizás de los que buscan muchas de nuestras contemporáneas.

Acompañame en este andar de risas, reflexiones, preocupaciones y llantos; de la mano de un grupo de mujeres que intentan equilibrar sus vidas de mujeres OCUPADAS con sus sueños de mujeres ENAMORADAS.

La media naranja


Las mujeres somos románticas, enamoradizas, soñadoras, ilusionadas. Cada hombre que decentemente marca nuestra vida, es, en ese momento, nuestra media naranja. Así lo sentimos y así lo deseamos.

Cada vez que nos enamoramos; lo hacemos para toda la vida y con todo el corazón. Solo que la gran mayoría de esas veces, las cosas simplemente no funcionan. Y nos sentamos a llorar como si la vida misma hubiese terminado. And we move on; and fall all over again. That’s our thing.

Como decía en “dating for dummies”; no somos esencialmente muy buenas al dating; pero somos master en amar, enamorar, mimar y soñar un futuro de a dos, con todos los amores que hemos tenido.

Entonces, he aquí mi ruego a todas las historias de amor producidas en Hollywood (y sus parientes cercanos): Si van a seguir vendiéndonos la “media naranja”, al menos déjennos creer que hay muchas medias frutas que puedan amarnos en cada etapa diferente de nuestra vida; y principalmente, muchas medias frutas con quienes podemos conquistar el “happily ever after”.

Las mujeres de hoy vivimos en la búsqueda de alguna nueva media naranja que sea perfecta para nosotros, entendiendo “perfecta” como la ideal para este momento de nuestra vida y para las necesidades que tenemos hoy.

Odio que nos vendan la creencia de que existe un solo ONE AND ONLY “media naranja”. Esto significaría que ya gastamos el cartucho con aquel primer amor de los 12 años. And he’s now probably fat, bold, unemployed... or married!

"Amor a distancia...

(prometo completar la frase en el transcurso del post)

Alguien me decía que el noviazgo debería tener límites territoriales. And I have to agree.

El noviazgo, que es básicamente el amor puesto en práctica, tiene 2 elementos fundamentales (si no únicos): comunicación y contacto físico. Y a la distancia, NINGUNO de los dos es verdaderamente sostenible en el tiempo, al menos, si los queremos sostener with each other... ;)

Aún así, nos venden la idea de que el amor verdadero lo puede todo; la distancia, la guerra y los engaños.

Cuando nos toca la distancia, estamos convencidos que podemos hacerlo. I've been there. Y lo que uno hace no es amar, es AGUANTAR. Punto. No se disfruta del noviazgo, no se comparte, no se intima, y definitivamente, no se ama. Solo se AGUANTA. Se aguanta porque este hombre vale la pena
el esfuerzo para disfrutarlo después.

"Amor a distancia... felices los cuatro", es la otra cita que recuerdo hoy. Si vivimos separados, es porque cada uno tiene una vida distinta... y lo mejor, quizás, es vivirla.

"Forget the prince with the horse; we want a vampire with a volvo"


Siempre me jacté de mi virtud-defecto-condición de ODIAR el romance, dado como aquel estereotipo de las rosas rojas, los ositos de peluche, las musicas "corta venas", las propuestas de amor públicas y demás.

Sin embargo, debo admitir que todas las mujeres buscamos romance. Hasta las más independientes-alteradas-ocupadas-solteras por elección somos parte de ésto, aún cuando lo neguemos a muerte.

Creo que estas mujeres del siglo XXI, independientes-alteradas-ocupadas como las llamo yo, lo que detestamos es el melodrama, lo cursi y lo corny; pero no el romance. Nos gustan los hombres considerados y atentos, que nos miman, que nos abren la puerta del auto, que van a buscar la pizza cuando no nos queremos mover del sofá, y tal.

La película "twilight" (o "crepúsculo", por su nombre en español), me dió esto. Romántica a ultranza, pero con un prince charming absolutamente atractivo, nada melodramático, 100% maleante, misterioso, rudo, dominante y en absoluto control. Completely swept me off my feet.

Así que queridos hombres; tomen nota: Los queremos románticos; maybe more Eduard Cullen than Romeo, but still, ROMANTIC.


 
Mujeres entre copas | TNB