El efecto gossip girl está aquí. No importa donde vivas, a donde vayas ni qué edad tengas; más que nunca en el siglo XXI, el rumor urbano se ha convertido en la ley. El rumor urbano es hoy la última palabra; la referencia inequívoca, el peso de la balanza o el quid de la questión... El salomónico rey del mundo social.
A nadie le importa si estabas borracha, si habías terminado o si solamente estabas bailando. A nadie le importa nada más que contarlo todo. Esta es la era del kiss-and-tell. Los teléfonos con cámaras y su affair con facebook y youtube se han convertido en la mayor amenaza a la privacidad, al secreto y a las escondidas.
Hoy más que nunca, somos lo que hacemos. So be carefull.
Seguramente recuerdan, back in 1999 (el siglo pasado!), American Pie se animó a hablar de sexo en la pantalla grande y una las lecciones que promulgaba era la ley del "1 a 3". Se trataba de que si un hombre dice que estuvo con 3 mujeres, significa que realmente estuvo solo con una; y cuando una mujeres dice que estuvo con 1 hombre, significa que realmente estuvo con tres.
Si eso era verdad en 1999; definitivamente ya no lo es en 2009.
Hoy en día el cuento es distinto y el juicio de valor también. Ya no está mal hablar de sexo y mucho menos hacerlo. Por eso tanto hombres como mujeres estamos dispuestos a tratar abiertamente nuestra sexualidad; sean matrimonios, noviazgos, relaciones casuales, infidelidades; straight or gay; one-on-one or party; y todo lo demás también.
Nuestra actitud ante el sexo opuesto ya no es un secreto sino todo lo contrario. La privacidad es un bien público y ha adquirido valor. Se cotiza a través de las redes sociales y forma parte del currículum.
Así que para terminar sin caer en análisis económico del sexo... I guess the lesson to learn here is "DO NOT KISS IF YOU'RE NOT WILLING TO TELL", because somebody else will.
Así que para terminar sin caer en análisis económico del sexo... I guess the lesson to learn here is "DO NOT KISS IF YOU'RE NOT WILLING TO TELL", because somebody else will.